UN APRENDIZAJE DE IDA y VUELTA

Vamos a hacer un recorrido que comienza en la forma de ver y dibujar el rostro humano, desde las relaciones entre las partes, hasta las medidas y las piezas que lo componen como un todo cuya representación no difiere en complejidad a la de dibujar cualquier otra cosa.

CABEZA DE PERFIL   

¡Seguro que tienes por ahí algún modelo que pose para ti!

Los materiales que vamos a utilizar serán, papel, lápiz HB y goma de borrar. Es bueno que el borde del papel tenga relación con una línea vertical de fondo (el marco de una puerta o una esquina de la habitación), de tal manera que la pieza resultante en el fondo sea tan importante como la forma en sí. Y no pienses en elementos definibles (barbilla, labios, nariz…) Sólo en la relación de líneas, ángulos, concavidad y proporciones.

                

Si no tienes modelo inténtalo con la reproducción de estos dos rostros.

                

Analiza la forma de las piezas del fondo (color rojo) con la misma intensidad que el resto. Observa que los bordes tocan la forma.

Cuando dibujes el interior relaciona puntos mediante líneas auxiliares que forman determinados ángulos con los bordes y con ellas mismas.

Las piezas resultantes pueden ser muy importantes para el encaje.

Los ángulos no varían, aunque cambies el formato.

Ahora dibuja cada uno de estos modelos.

Recuerda. Fondo y ángulos.                                                            …continúa